Es la presencia de sangre en la cámara anterior del ojo, produce una disminución súbita de la visión y en general resuelve en algunos días (3 a 5) pudiendo recidivar y puede provocar aumento de la tensión ocular.
Tratamiento: indicar antifibrinolíticos e hipotensores oculares, de no revertir, el tratamiento es quirúrgico.