Es la hinchazón o infección de la membrana que recubre los párpados y cubre la parte blanca del ojo y se puede presentar en un recién nacido. Puede ser por a) un conducto lacrimal obstruido b) Gotas oftálmicas antibióticas, administradas justo después de nacer c) Infección por bacterias o virus. Las bacterias que normalmente viven en la vagina de una mujer se pueden transmitir al bebé durante el nacimiento. Lo siguiente puede causar un daño más grave al ojo: a) Gonorrea y clamidia: estas son infecciones que se diseminan a través del contacto sexual. B) Los virus que causan el herpes genital y oral: estos pueden llevar a un daño grave en el ojo. Las infecciones oculares con herpes son menos comunes que aquellas causadas por la gonorrea y la clamidia.
Tratamiento: La irritación ocular causada por las gotas oftálmicas administradas al nacer debe desaparecer por sí sola. En caso de un conducto lacrimal obstruido, un masaje caliente suave entre el ojo y la zona nasal puede ayudar. Esto generalmente se intenta antes de comenzar los antibióticos. Se puede necesitar cirugía si un conducto lacrimal obstruido no se ha destapado cuando el bebé cumple 1 año.